Textos para Proceso de paz

Después de dos intentos, creo que al final publicaron el tercer texto por compromiso. Pero es que alguien tenía que decirlo.

Primer escrito para Proceso de Paz.

A favor del proceso de paz - Una muestra de opiniones sacadas del foro público de la Guardia Civil en internet.

ETA morirá sin gloria, como el marxismo. Suerte que son ya un asqueroso grupo marginal, gentuza sin seso, imbéciles e idiotas descerebrados haciendo gansadas, destruyendo buzones de correos, contenedores de basura y cajeros automáticos que pagan sus jodidos padres y madres. Esos espantajos gudaris no son personas. Son ratas de cloaca cuyas vidas valen menos que las de las víctimas. Esas ratas de cloaca que al final lloran y se lo hacen en los pantalones, no se merecen la muerte, es demasiado rápida.

Lo mejor para estos casos es la "pena del tronco", amputación de las extremidades, de sus "partes", se le sacan los ojos y la lengua, se le deja sordo, y con un lacito en la cabeza se le devuelve a sus familiares para que se hagan cargo de él para el resto de su vida, él me imagino que a la larga, sin ver, oír, sentir, moverse y no poder comunicarse, se volverá loco, lo que si es que podrá ser venerado por familiares y amigos y saber lo que les espera al resto. Porque no se merecen la muerte, es demasiado rapida y se pueden llegar a olvidar, y me jode, y mucho, tener que darles de comer los próximos 20, 30 ó 40 años y darles alojamiento y que encima salgan con su paro, con su carrera y como unos héroes.

Y pensar que el impresentable de zETAp y la mayoría de los que le votan dicen que no debe de haber ni vencedores ni vencidos, que se debe dialogar... ¡Nunca! Contra ETA, metralleta. Están abocados a su desaparición y lo saben; es por ello más necesario quer nunca no caer en trampas urdidas por Otegi. O como las del mártir que se lió a cabezazos contra el Patrol de la Guardia Civil y la pared de urgencias. Seguro que llega el capullo del Fiscal de T.S. de Vascongadas y acepta la Denuncia por Lesiones y Torturas del "puto-ciervo de mierda" y a joder a los Compañeros.

Qué penita que ahora se hayan llevado un chasco, al saber que su genoma es igual al resto de los pobres mortales. Aunque yo me niego a pensar y a creer que cierta gentuza tengan los mismo genes que las personas de bien. Me niego a ser igual que ellos: sus caras, sus rasgos son distintos, parecen todos familia, nosotros somos mejores. Tienen la Nacionalidad Española, pero no son Españoles. Ni estos, ni los de Cacaluña.

Segundo escrito para Proceso de Paz.

Otra víctima

Tengo muchas más probabilidades de morir a manos de mi pareja o ex-pareja que de ser víctima de un atentado. Más aún, tengo muchísimas más papeletas de padecer un accidente laboral que un atentado. O un cáncer de cérvix. O un accidente de tráfico provocado por alguien a quien no le gusta que le digan cuántas copas se tiene que beber. O un embargo por impago al no poder acceder al mundo laboral por tener que cuidar de mis hijos o de mis padres con Alzheimer.

Son miles los cargos políticos que llevan escolta, pero no hay dinero para las mujeres amenazadas. Decenas los titulares diarios sobre el terrorismo de ETA, y un mínimo espacio para denunciar las deficientes condiciones laborales. Leyes, tribunales y fuerzas de seguridad trabajando firmemente en pos de la erradicación del terrorismo, y tímidos intentos de cubrir la papeleta en políticas y justicia sociales.

Yo soy una víctima. Soy huérfana de madre, y mi padre, el hombre que debía cuidarme, protegerme y ayudarme a crecer, me usó como su sustituta en la cama. Nunca hablo de abusos a menores, incesto, violación o maltrato. En mi blog denuncio muchas cosas pero nunca ésas, porque acercarme a lo que siento es una tortura. No me siento segura, en nada ni con nadie. Paso por fases de aterradoras de impotencia, culpa, vergüenza, adicción, ansiedad y autodestrucción. He pasado también por etapas autoprotectoras. Intentas volverte insensible (transtorno disociativo de la personalidad, que diría mi psiquiatra). Tengo alguna adicción que nadie se imagina que pueda ser una adicción. Por suerte no parezco una agresora potencial, mi bulimia está controlada, mi conducta hipersexualizada con masturbación compulsiva incluída hace años que quedó atrás y CONSCIENTEMENTE sé que no soy culpable de nada. Por desgracia parece ser que soy demasiado inteligente para que ciertas terapias tengan efecto y estoy demasiado afectada para entrenarme en ciertas habilidades. Vivan las drogas.(legales). Si tengo una crisis siempre pueden apartarme a un lado.

Escribir esto me ha llevado muchos pañuelos.

Pero a mí no me hacen homenajes. No me prodigan muestras de solidaridad. No me condecoran. No me ponen de ejemplo cuando me opongo a la condena perpetua, a la pena de muerte, a la tortura, a la venganza. La oposición no le reclama al gobierno que acuda a los actos que organizo. No me ponen como símbolo de la nación española ni de patriotismo. No me piden que vaya a los colegios a hablar sobre violencia. No me levantan monumentos ni me designan escoltas. No me reservan plazas públicas ni en educación ni en empleo. No escriben diez noticias al día sobre mis reivindicaciones. No hacen encuestas preguntando si ZP me apoya. No me califican de heroína. No me dedican manifiestos. No me otorgan indemnizaciones, ni roles morales, ni estatus social ni ético. No soy ejemplo de paz, ni de libertad, ni de democracia. Ni siquiera me incluyen en los barómetros del CIS como "problema de España", junto con "El terrorismo de ETA", "El Estatuto de Cataluña" y "Los nacionalismos". Ni a mí ni a víctimas como yo.

El terror en el que viví y que revivo no es rentable políticamente, y dicen que sólo soy víctima de un delito.

Abro las páginas de cualquier diario y allí están. Las Víctimas. Con mayúscula.

Tercer escrito para Proceso de Paz.


Exijo el cese de la violencia

Tengo claro que todas las violencias tienen una causa. Soy consciente de que algunas violencias tienen una causa que puedo disculpar. Afirmo que no todas las violencias son iguales. Me parece una estupidez condenar las violencias, porque, sinceramente, prefiero eliminarlas. Y para eliminarlas hay que acudir a las causas.

Yo no soy española, pero no porque España me avergüence, sino porque soy catalana.
Dicho esto, yo me avergüenzo de España, pero no porque sea catalana, sino porque es un estado fascista y violento.

No lo digo con ánimo de ofender. Reconozco públicamente que me siento orgullosa de una parte del pueblo español y que de igual modo me avergüenzo de una parte del pueblo catalán. Sólo constato un hecho. No creo que sea el lugar ni el momento indicado para hablar de la "transición" del dictador genocida a la monarquía del movimiento. Baste decir que seguimos en el franquismo, pero que ahora se nos permite ratificarlo cada 4 años.

Me gustaría remarcar una nimiedad del espíritu de la transición, que creo que es una causa importante de su violencia: los herederos del régimen fijaron el límite del ejercicio de las libertades públicas en todo aquello que atentara "a la unidad, independencia y seguridad del Estado". Actualmente se amparan en su constitución como límite de todo debate y dan por sentado que las "nacionalidades" encuentran en ella todo el reconocimiento que pueden obtener. Su ejército es el único entre los paises "democráticos" que tiene como misión constitucional garantizar la integridad territorial del estado. España una, ante todo.

Siguiendo este espíritu, no es extraño encontrarse con que contra el nacionalismo "todo vale". No he dicho terrorismo, he dicho nacionalismo. En el caso de Euskal Herria, porque "ETA mata con la excusa de exigir el derecho de autodeterminación de los vascos, así que todos los que defienden el derecho de autodeterminación de los vascos son etarras". Y punto. La sociedad vasca padece un decaimiento moral. Y punto y aparte.

Pero como (por el momento) administrativamente soy ciudadana del reino católico (y así lo atestiguan mi DNI y mi declaración de impuestos), creo que tengo derecho a exigirle que deje de atentar contra "su pueblo". Porque lo hace utilizando tanto su fuerza legal (fuerzas armadas, administración pública, medios de comunicación, tribunales y policías) como la ilegal. Este estado asesina, tortura y secuestra. Y no sólo eso, sino que aplaude y condona a sus asesinos, torturadores y secuestradores. Practica el derecho penal de autor, el derecho penal del enemigo, el derecho penal de la voluntad. Recorta libertades y garantías. Y encima tiene el cinismo de llamarse "estado de derecho".

Precisamente ésa, la violencia de un estado contra sus ciudadanos, a los que además ha convencido de que es necesaria, es la más repugnante.