Esas voces ya no las escuchamos. Un día les prestamos atención, atendimos a sus argumentos, razonamos con ellas, nos importaron. Ya no. Ahora, no sólo no nos dejan definir España, sino que ya no nos permiten definir Catalunya. Su esfuerzo será en vano. No está en su mano decirnos qué o qué no somos. El problema es suyo.
Himne Nacional de Catalunya:
Diada Nacional de Catalunya:
Teatre Nacional de Catalunya:
Arxiu Nacional de Catalunya:
Museu Nacional d'Art de Catalunya:
Orquestra Simfònica de Barcelona i Nacional de Catalunya:
Atles Nacional de Catalunya:
Consell Nacional de la Cultura i de les Arts de Catalunya
Biblioteca Nacional de Catalunya
3 comentarios:
Yo un día de estos tengo pensando exiliarme a Laponia.
Por lo menos.
Ha sido un desahogo, ya me he liberado de la presión soberanista hasta que vuelvan a inflarme la rueda de recambio y me ponga a escuchar el Cant de la Senyera 200 veces (que musicalmente me emociona más que Els Segadors).
Ahora me toca leer las noticias (a ver qué se me infla).
¿Estás más animada?
El celebro, se te inflará el celebro. Jijijiji :-)
Sí, mucho más. Yo también me he desahogado... ;-)
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